Soy Catalina González. El 2009 empecé a estudiar yoga y desde ahí sigo en este camino hasta hoy y para siempre. Dentro de esto, he incursionado en diferentes ramas que se relacionan con el bienestar del ser: yogaereo, meditación, nutrición ayurveda. Hace 10 años me dedico a hacer clases de vinyasa yoga y yogaereo, fundando el 2014 mi escuela, annamaya yoga.
Entender el yoga como un estado, como un lugar de plenitud que está en nosotras/os por el solo hecho de existir, me ha permitido trabajar conmigo misma y entender tantas cosas que obstaculizan el buen vivir. El cuerpo físico es la forma, el traje del alma; las asanas o posturas trabajan este lugar con el solo objetivo de lograr traspasar esta primera capa hacia lo que verdaderamente somos. La respiración y luego la meditación nos permiten ese espacio de atención, yoga es vivir en el presente.
Soy una convencida de que el yoga y sus herramientas son la salvación de este mundo codicioso y competitivo en el que nos hemos transformado. La clave es conocerse, entenderse, aceptarse como parte de un todo, soltar las dualidades y conectar con el amor y la compasión… la base de la naturaleza. Y desde estos principios, quiero compartirles todo aquello que a mí me ha ayudado, todo aquello que he aprendido y adquirido para llevar una vida en coherencia con el universo, con la naturaleza y con ese pedacito de universo que somos cada una/o de nosotras/os.